Mar 7, 2008

Olores de un camino.

Estaciono el coche. Las llaves se las dejo a Don Hermilo, que por sólo 20 pesos, siempre me aparta lugar. Es mi valet parking personal. Paso por la vitamina C de cada día, un vaso grande de Café. El olor inconfundible de mi capuchino me acompaña mientras camino a la oficina. A lo lejos percibo el "incienso" de la Iglesia que está en la esquina. Cruzando la calle Schiller, llega el aroma de tamales y atole...siempre tentadores, abren el apetito. Para evitar la tentación doy un sorbo a mi bebida energética y continuo el recorrido. Y ahí está: respiro hondo y aguanto la respiración para pasar por esa coladera (siempre abierta) que huele a drenaje. Paso por enfrente de los señores que están montando el puesto de las quesadillas, huele a gas butano, que se fuga levemente del tanque que emplean para calentar el comal. Saludan amablemente y respondo con una inclinación de cabeza. Doy la vuelta a la calle, ya estoy en Taine. Huele a tierra mojada, es la señora que riega todas las mañanas. Me desea los buenos días. Ahora, ya entré al edificio: en el elevador se mezcla la loción de ese señor y el perfume de esa mujer. Llego al piso de mi oficina, Doña Ana ya empezó con la limpieza y despide un olor a pino.
Acompañada de fresco aroma, enciendo mi computadora y empiezo a escribir...

4 comments:

DeLaCruz said...

¡Que sabio es evitar respirar cerca de una cloaca! Pero, ¿No crees que es peor la mezcla del aroma de la loción con el perfume? Por que es bastante "inchi" cuando esos olores se mezclan, sobretodo por que eso quiere decir que quien lo trae puesto se pusó en EXCESO! Por eso, yo prefiero oler a mi...y por eso hoy, no me bañé.

aDios!

maria jesus said...

No conozco los atoles ni las quesadillas, pero el olor a tierra mojada debe despertar ganas de salir corriendo de la ciudad a tumbarse en la hierba, en lugar de meterse en una oficina y colocarse delantre de una pantalla, pero !que le vamos a hacer!Como dicen por aquí es el pan de nuestros chiquillos

Anonymous said...

¿0645 hrs? qué intenso... saludos!

zocadiz said...

Rish: asi es, preferible el autentico aroma a los artificiales.

Ma. Jesus: Deberías darte una vuelta por acá para conocer las quesadillas, atole, tamales y demás.... cuando quieras avísame ;)

Javier: así son los días en la city: intensos. Que bueno que te diste una vuelta por el blog.