Estaba fumando un cigarrillo.
Conviviendo con ella misma.
Arregló su cuarto, sus pensamientos, la cocina y el clóset.
Visitó algunas tumbas y recordó momentos alegres.
Ventiló el ambiente. Lo único que desapareció fue el apetito.
Platicaron como antes, como siempre.
Escucharon buena música.
Tomaron Coca-Cola, fría.
Abrieron el corazón: inquietudes, pesares, ideales.
Como en los viejos, ahora nuevos, tiempos.
Y todo quedó ordenado.
5 comments:
a ver cuando nos toca echar la plática y una coca cola bien fria juntos
te extraño amiguera
jajaja... cuanto te pagan por hacer promoción COCA-COLA
No es tan facil en una reunión rutinaria ¿? hablar con el corazón abierto.
Lo corriente son las banalidades.
Sencillez en lo cándido.
Un beso
buena musica + coca cola... supremo..
saludos
Es tranquilizador saber que todo está en orden (cualquiera que este sea) A veces cargamos innecesariamente demasiadas cosas (físicas y emocionales). Es bueno saber, que al menos ese día todo estuvo en su lugar.
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