Perdóname por ir así buscándote
tan torpemente, dentro de ti.
Perdóname el dolor, alguna vez.
Es que quiero sacar de ti tu mejor tú.
Ése que no te viste y que yo veo,
nadador por tu fondo, preciosísimo.
Y cogerlo y tenerlo yo en alto
como tiene el árbol la luz última
que le ha encontrado al sol.
Y entonces tú en su busca vendrías, a lo alto
Para llegar a él subida sobre ti,
como te quiero, tocando ya tan sólo a tu pasado
con las puntas rosadas de tus pies,
en tensión todo el cuerpo,
ya ascendiendo de ti a ti misma.
Y que a mi amor entonces le conteste
la nueva criatura que tú eras.
Pedro Salinas,
La voz a ti debida
1 comment:
hola: no entendi... de cual fumaste... que profunda saliste jajaja
Animo!!!
Post a Comment