Nov 21, 2010

Para siempre...para siempre...para siempre...

No había gritos, ni llantos.
En su mente retumbaban las palabras: hasta que la muerte los separé.
La indiferencia reinaba en el ambiente.
El día de su aniversario se separarían.
No para siempre.

2 comments:

Gabriela said...

Felizmente, no había gritos ni llantos.

இலை Bohemia இலை said...

Todo tiene fecha de caducidad!