El tiempo deja su huella, el cuerpo envejece, cada vez es menos capaz de mantener el alma.
Y es que los hombres no somos eternos, todo por servir se acaba.
Pensemos en el más allá, examinemos la conciencia.
¿Quién nos asegura que viviremos mañana?
Nadie.
Reflexionó porque al día de hoy, ella ya se inyecta insulina y él ya perdió todos sus dientes.
3 comments:
Qué bueno leer cosas nuevas en este blog.
Gracias!!! Procuraré volve ra escribir seguido. :)
¡Oh,Zocadiz ataca de nuevo!
Bienvenida
:)
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