Cuando no tengas inspiración para escribir, recurre al baúl de los recuerdos. Ayer eso funcionaba, hoy no basta con sumergirme en ese baúl. Me parece que debo perderme en él, ahogarme. Y aún así, aún así, no logro seducir a la musa de la escritura, nada viene a mi mente, la cual se queda en blanco. La frustración sube como espuma, cuento los posts sin publicar: 20. ¿Qué se hace? Tengo muchos temas en el tintero pero ninguno verá la luz. La sensación es como la de parir a un niño muerto.